Aquí de regreso, después de mucho tiempo de no escribir. Voy manejando, voy caminando, estoy con mis hijos y de repente pienso.. "esto debo de escribirlo en mi blog para que quede de recuerdo" pero pasan los días y no tengo tiempo. Desde la última vez que escribí, han pasado tantas cosas. Hace un año para ser exactos, llegó un nuevo miembro en la familia, una preciosa nena: Elisa. Ahora ya somos cinco en casa y nuestra vida ha crecido en ruido, risas, compromisos, preocupaciones, retos y sobre todo en alegría y amor. La mayoría de mis amigas y conocidas, solo tienen 2 hijos, asi que cuando les dije que ibamos por el tercero, muchos nos dijeron que estabamos locos, que la vida no estaba para andar manteniendo tantos hijos, que las colegiaturas, que los pañales, que la leche.. bla bla bla.
Yo NUNCA dude ni me dio miedo tener un tercer bebé, siempre confié en que primeramente Dios nos iba a dar lo que necesitaramos y segundo confié en Javi y en que el tiene todo el talento para poder sacar adelante las necesidades de nuestros hijos
Hoy en día vivimos en una sociedad en donde "hay que darle lo mejor a los hijos, la mejor escuela, la mejor ropa, las mejores piñatas, los mejores viajes, la mejor casa y el mejor carro". Una sociedad tan superficial y tan vacía que cree que lo anterior va a construir hijos felices y plenos!! Y entonces hay que tener pocos hijos para darles mucho y que no sufran!!
Yo siempre estuve convencida que quería tres hijos.. y ahora que los tengo me doy cuenta que definitivamente no nos equivocamos y que Dios provee. No nos ha faltado nada, al contrario estamos mas llenos que nunca. Gracias Elisa por completar nuestra familia, gracias Elisa por ser la cereza de nuestro pastel. Te amamos demasiado! Y gracias Dios por la familia que tenemos.